Evolución
Ya en 1904 se estaban anunciando lavadoras eléctricas en los Estados Unidos, y las ventas norteamericanas habían alcanzado las 913.000 unidades en 1928.
Lavadoras automáticas
Las primeras lavadoras automáticas datan de principios de siglo (1904). La primera lavadora fabricada en Europa consta de 1951. Empresas como Whirlpool empezaron con el negocio de las lavadoras.
En un primer momento, la ropa se lavaba cociéndola en agua caliente y jabón. A veces se la golpeaba con palas de madera mientras se colocaba en tinas de madera.
En 1780, Robinson de Lancanshire patenta una máquina para lavar y escurrir la ropa pero no se tiene la seguridad de que llegara a construirse.
En 1782, el inglés Henry Siedger logra construir una máquina de lavar, de madera, con forma de tinaja que tenía que ser impulsada a mano con una manivela.
En 1855 se construye una máquina para lavar y secar la ropa de los hospitales de Crimea.
En 1880 aparecen las primeras lavadoras que calientan el agua mediante gas o carbón.
El ingeniero electro técnico Incola Tesla inventa un motor eléctrico compacto sobre 1888.
En 1901, el norteamericano Alva Fisher inventa la primera lavadora eléctrica, acoplando a una de las ya existentes, un motor eléctrico que impulsaba un tambor. Un mecanismo automático invertía el sentido de giro de vez en cuando para que la ropa no se apelmazara.
Más tarde se inventaron unas lavadoras que tenían unos rodillos para escurrir la ropa.
Tras la 2ª Guerra Mundial, en 1945, empieza el despegue de ventas de lavadoras en todo el mundo occidental.
En 1960 se incorporaron temporizadores y, pocos años mas tarde, microprocesadores.